Hoy en día el comienzo de la jornada vital suele acabar siendo equivalente a comienzo de jornada informática.
Quiero decir que lo primero que hacemos es encender el ordenador, y por supuesto conectarnos a Internet. Se supone que lo primero que vemos, lo primero que buscamos, dice más de nosotros, y de nuestras necesidades reales de ocio, de lo que queremos pensar. En cuanto Telefónica se digna a hacer conexión por las mañanas, lo primero que abro, sin dudar, son las siguientes páginas web: Facebook, Twitter, Blogger, Etsy, Ebay y Lecturalia. Más tarde, cuando ya me he dado mi primer atracón, abro el email. De lo cual se deduce que:
a) Soy adicta a las redes sociales
b) Soy adicta a hablar de mí misma y
c) Soy adicta al ordenador
Antes, la mayor tendencia de principio de día era desayunar, posiblemente hasta encender la televisión. Ahora, la absorción de información de primeras es tremenda, y me pregunto si no estaré cada vez más saturada de ésta.
Procuraré solventar hoy mis múltiples adicciones a base de
a) Salir esta noche
b) Hablar con personas reales y
c) Recurrir a drogas más directas, como por ejemplo el alcohol.
¡Milady! Acabo de enterarme de tu Proyecto Poema y me falta tiempo para apuntarme corriendo. ¡Yo quiero uuuuuno! Y si se me permite elegir tema, a ser posible relacionado con el fin del mundo (sí, cada una tiene sus obsesiones y el Apocalipsis parece ser la mía, qué le vamos a hacer). Muak :*
Hey My Very Beautiful One! Envíame tu dirección a proyectopoema@gmail.com y estaré encantadísima de añadirte a la lista.
Apocalipsis, yeah!
Hay que obligarse a socializar en carne y hueso, a pesar de lo cómodo que es el virtualismo para nosotros, oh tímidos enfermizos.
Yo lo hago desde hace unos años y me va mejor 🙂