Death note
Por fin, tras otra sesión nocturna de sábado en la que, gracias al frío glacial de cierto pueblecito montañero, me quedé en casa viendo anime pegada a la estufa halógena,…
Por fin, tras otra sesión nocturna de sábado en la que, gracias al frío glacial de cierto pueblecito montañero, me quedé en casa viendo anime pegada a la estufa halógena,…